El Patriarcado de Fener, junto al Cuerno de Oro, es el corazón del cristianismo ortodoxo. Después de la declaración de Constantino el Grande del cristianismo como la religión del Imperio Romano, la capital fue trasladada de Roma a Bizancio. Con la conquista (1453) del Imperio Otomano, la sede del Patriarcado permaneció en Estambul.
Iglesia de Panagia de Blachernae, el más conocido y celebrado santuario de la Santa Virgen situado cerca del Cuerno de Oro, famoso por el hagiasma (fuente de agua bendita), bueno para curar problemas de salud, y el Hagion Lousma (baño sagrado) bueno para limpiar el alma donde el emperador también vino a purificarse a sí mismo.
San Salvador en Chora (Museo Kariye), originalmente un monasterio bizantino, dedicado a Jesucristo el Salvador, sobrevivió con fantásticos mosaicos y frescos, que representan escenas de la Biblia, la vida y los milagros de Jesús.
Pantocrátor (Mezquita de Zeyrek), el complejo monástico fue uno de los más grandes y mejor organizados del periodo bizantino, compuesto por dos iglesias y una capilla funeraria, baños, un hospicio para ancianos, un hospital y una escuela de medicina, un albergue para viajeros y una biblioteca.
La iglesia de Santa María Pammacaristos (Mezquita de Fethiye), construida en el siglo XI por Juan Comneno, exhibiendo el refinamiento estético alcanzado en la Edad Paleológica, perteneció originalmente a un convento de monjas. Alojó al Patriarcado durante un tiempo después de la conquista.
Zoodochos Pege en Balikli, dedicado a la Madre de Dios en Pege, con una cisterna subterránea, llena de peces de oro relacionados con un milagro conocido, y la fuente de agua bendita.
San Sergio y Baco, un hito en la arquitectura eclesiástica bizantina. Hoy es conocida como la "Pequeña Santa Sofía" porque su plan general es un precursor de la Santa Sofía.
Junto a Santa Sofía se encuentra Hagia Eirene, la antigua iglesia patriarcal con sus impresionantes dimensiones.
Santa Sofía, durante muchos siglos fue la iglesia más grande de la cristiandad, dedicada a la Sabiduría Divina, un atributo de Cristo. Santa Sofía jugó un papel importante en la coronación de los emperadores y se celebraron muchas victorias en este notable edificio.